EDITORIAL: Tanta paz…
Sabio, y único es el refranero español cuando se desliza por certezas, con la maestría que nos caracteriza, en frases como “tanta paz lleves como descanso dejas…”. La ya exalcaldesa de Aranjuez, María José Martínez dejó su cargo la pasada semana, rompiendo su ‘contrato’ con la ciudadanía porque se veía incapaz de compatibilizar su cargo con primera edil con su escaño de diputada del Partido Popular en la Asamblea de Madrid. Al albor de las suspicacias, y como su homónimo en Humanes, desde la cúpula popular le dieron a elegir y eligió lo que ya había elegido Durante los últimos cinco años: olvidarse de los vecinos y vecinas de Aranjuez.
Esperamos con impaciencia que, ahora que cohabitará de manera directa en el universo Ayuso, le saque unas briznas de inversión para Aranjuez a la Presidenta regional y haga lo que no ha hecho nunca como máxima responsable del municipio, que no es otra cosa que velar por los intereses de Aranjuez, plegaria que dudamos llegue a buen puerto.
Ahora se inicia una nueva etapa con Miguel Gómez, -si no le tuerce el morro la ultraderecha, que no se lo va a torcer-, llena de retos para encauzar un futuro para el municipio, porque la posibilidad de que haya un nuevo alcalde, que de nuevo tiene poco puesto que lleva cinco años en el equipo de Gobierno con altas responsabilidades, abre la posibilidad de replantearse un nuevo escenario, si es que aparca la arrogancia y altanería de su predecesora y recupera aquello de lo que tanto presumen en el Partido Popular: el acuerdo y el consenso.
Existen muchos retos de presente y de futuro, ante los que los grupos de la oposición hemos planteado sentarnos para debatir, para que nuestra ciudad inicie un camino hacia un futuro mejor, algo que hasta ahora no ha sucedido. Algunos de esos retos de futuro se han tornado en elemento de presente, sobre todo cuando Europa nobleza obliga, y como es la mano que mece la cuna pues no queda otro remedio que afrontarlos, si es que Gómez y el PP quieren, por supuesto.
Asuntos como la Agenda Urbana, el Plan de Ordenación Urbana y el Plan de Movilidad Urbana Sostenible, que lidera un concejal -de VOX- que ha presumido de no llegar a acuerdos con la izquierda, son pilarles fundamentales para el desarrollo de Aranjuez, pero esas actitudes antidemocráticas deben desprenderse del debate de los Plenos para ocupar un lugar de privilegio en una mesa de negociación que el concejal de VOX no sabe lo que es. Alguien deberá hacer pedagogía si se pretende que desde la Comunidad Europea lleguen los fondos tan esperados que necesitamos en nuestro Real Sitio. Es urgente cambiar el fondo pero también las formas.
Miguel Gómez inicia una nueva etapa en la que le deseamos la mejor de las suertes, porque la suya será la de los ciudadanos y ciudadanas, pero no podemos olvidar que lleva cinco años formando parte de un Gobierno que nunca reivindicó las demandas ciudadanas respecto a la sanidad pública, no trabajó para devolver a los profesionales médicos a las Urgencias del centro de Abastos ni reivindicó que se mejoraran los servicios del Hospital del Tajo, en precario desde hace muchos años.
Tampoco supo gestionar los fondos europeos que han llegado desde el Gobierno de España. Más de 50 millones de euros que se pusieron a disposición de esta ciudad y que no han tenido la influencia y la repercusión para las mejoras que necesitábamos. También decidió destinar todo el remanente de tesorería a paliar la deuda, cuando el Estado permitió que parte de ellos pudiesen emplearse en invertir para las ciudades. Y muchos de esos fondos europeos se perdieron, como los destinado para los desperfectos de Filomena, por no tener diseñados los proyectos que había que desarrollar.
Gómez ha sido, y es hasta al menos el diseño de un nuevo organigrama, responsable de áreas tan importantes como la de Obras y Servicios, que incluye el mantenimiento de la ciudad, lo que no le deja en buen lugar, ya que llevamos mucho tiempo observando que los barrios de Aranjuez siguen desatendidos, que la ciudad presenta un estado deficiente y que la limpieza no luce como debería para tener un contrato, firmado por el Partido Popular y VOX, que ha empeorado las condiciones y que ha elevado su coste.
También es Gómez el responsable de fiestas y ya hemos visto que las de San Fernando han sido las peores fiestas que ha tenido Aranjuez en muchísimos años, con poca inversión y con muy baja participación, por lo tanto tenemos que ser prudentes ante este nuevo ciclo dentro del Partido Popular. El nuevo alcalde tendrá que decidir entre una gestión continuista, abrazándose a la extrema derecha en nuestra ciudad o aislarla y recuperar la normalidad democrática, tal y como se está haciendo en toda Europa. En sus manos está, y en ese escenario tendrá el apoyo del Partido Socialista.
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