1978. Constitución Española

El próximo viernes, 6 de diciembre, se celebra el día de la Constitución Española. La carta magna actual se aprobó en sesiones plenarias tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado el 31 de octubre de 1978 y fue ratificada por los españoles y españolas el 6 del diciembre del mismo año.

La Constitución Española “es el eje del sistema político y del ordenamiento jurídico ven la que se asientan los derechos fundamentales y las libertades públicas, los principios de actuación de los poderes públicos y la organización institucional y territorial del Estado”.

Todos los ciudadanos y las ciudadanas de este país tienen recogidos sus derechos en esta carta que, además, es el sostén de la Democracia que, en estos días, tanto pregona la derecha extrema y la extrema derecha. Sin embargo, el principio fundamental de la democracia y de la Constitución debe prevalecer sobre cualquier interés político y personal, y eso es lo que ni Partido Popular ni VOX cumplen a pesar de tratar de envolverse en una bandera y en el principal documento de nuestro país para atacar las libertades ciudadanas.

El primer artículo de nuestra Constitución expresa que “España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político”. Además, afirma que “la soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado”. Y, por último, manifiesta que “la forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria”.

La derecha española ha decidido sellar el libreto constitucional desde este primer artículo. Lo primero porque no acepta que el pueblo sea soberano, porque discute y pone en cuestión los resultados electorales cuando no les favorecen, porque no respectan ni la libertad, ni la igualdad, ni el pluralismo político ni, sobre todo, la justicia. El Partido Popular lleva cinco años bloqueando la renovación del Poder Judicial, con un claro objetivo de politizar a quienes tienen que velar por el estado de Derecho. Este bloqueo es un evidente hecho anticonstitucional y, sobre todo, un atropello a la razón cuando, incluso, admiten que no lo hacen para preservar la justicia.

También atacan ahora a la Casa Real olvidando que España es una Monarquía Parlamentaria que tiene su representatividad en los Reyes, a quienes también han comenzado a discutir por hacer lo que deben hacer, que es proponer candidatos a la Presidencia del Gobierno. Les pareció bien cuando nombró a Feijóo a pesar de que no contaba con la mayoría suficiente para formar gobierno y, ahora, les ha parecido mal que nombrase a Pedro Sánchez como alternativa ante una investidura fallida, que ha tenido al país paralizado, por el capricho de un ególatra cuyo destino era el fracaso.

Partido Popular y VOX confunden libertad con libertinaje, y es las últimas semanas están martilleando la Constitución Española alentando actos vandálicos y violentos simplemente porque no aceptan que el pueblo español ha decidido que no quieren que sean sus representantes en el Gobierno de la nación. Pedro Sánchez ha conseguido aunar hasta a ocho fuerzas políticas que le han mostrado su apoyo para erigirle en Presidente del Gobierno, y esta pluralidad, con múltiples sensibilidades políticas, es sobre la que sostiene un gobierno que buscará seguir con el progreso y el avance social de España.

Está muy bien ampararse en la Constitución y en la Democracia, como hacen los herederos del franquismo -VOX- amparados por quienes asumen una ideología de desigualdad, intolerante, machista, homófoba, racista y cobarde, -PP- pero es esencial asumir que vivimos en un Estado de Derecho que no admite funambulismos. Bien harían estar rancias derechas en asumir que la mayoría de españoles y españolas amparan un Gobierno progresista que seguirá trabajando para encontrar la paz social, mejorar el estado de bienestar y disminuir las desigualdades.

En nuestra carta Magna reza que “La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas”. En un buen momento para que Partido Popular y VOX lo entiendan y lo asuman. Ahora tienen unos días para leerse un documento que, a buen seguro, les abrirá lo ojos para saber qué es la Constitución Española porque, demuestran, que aún no lo saben.