¡Qué frágil es la memoria!

Luz Del Pozo. Secretaria de Sanidad del PSOE Aranjuez

¿Cuántos de los que insultan a Pedro Sánchez se han beneficiado de tener un contrato indefinido por la modificación de la Reforma Laboral? ¿Y por la subida del Salario Mínimo? ¿Y por los Ertes? ¿Y por las ayudas a las Pymes? ¿Y por la implantación del Ingreso Mínimo Vital? ¿Y por la subida de las pensiones? ¿Y por la bajada del IVA de los alimentos básicos? ¿Y por el  descuento del combustible? ¿Y por  la gratuidad en el transporte público? ¿Y por la bajada de la electricidad y del gas? ¿Y por el cheque de 200 euros para mitigar el alza de la cesta de la compra? ¿Y por la ayuda  de 300 millones para los agricultores?

Todas estas medidas, más otras muchas más, han beneficiado a españoles y españolas en momentos difíciles para el país, precisamente para que España siguiera avanzando y no se rompiera entre ricos y pobres, como le  gustaría  a la derecha rancia y ultra, a la que no le importa la Amnistía, pero que  no soporta que Pedro Sánchez vuelva a ser Presidente.  

¡Qué frágil es la memoria!

Es lamentable que los que insultan al Presidente no pongan en valor la acción política de un Gobierno progresista que, con una crisis sin precedentes, aprobó más de 215 leyes. La de la Eutanasia,  la ley Trans (que en Madrid va a derogar Díaz Ayuso), la de las Familias, las Ambientales para mitigar el  cambio climático, la de Vivienda, la de Memoria Democrática…

¡Qué frágil es la memoria!

Lo más triste es que se olvide lo más importante, la protección de nuestra salud. Me pregunto qué hubiese pasado si hubiese tenido que gestionar la derecha la crisis sanitaria y económica del  COVID. ¿Habría primado la salud y la protección de españoles y españolas, como hizo nuestro Presidente? Rotundamente, no. Díaz Ayuso dejó morir a miles de mayores en la residencias, solos, por no llevarlos a la Sanidad Pública y no se le ha llamado asesina como está haciendo la derecha con Pedro Sánchez, sin motivo. Se necesita ser desconsiderado y mal patriota para llamar “asesino” al Presidente que evitó muchas muertes gracias a la gestión del COVID, primando la protección de todos los españoles y las españolas, utilizando todos los recursos para obtener la vacuna, para ser uno de los primeros países en vacunarnos. Y, mientras tanto, gestionando la crisis económica para traer 140 millones de  los Fondos Europeos (que el PP se quiso cargar malmetiendo en la Unión Europea).

¡Qué frágil es la memoria!

No recuerdan que el país se paralizó al completo y que, gracias a las medidas de un gobierno progresista, que llevó a cabo medidas para mejorar la vida de la ciudadanía, hoy estamos mejor que antes de la crisis. Qué diferentes son las prioridades de un gobierno de derechas conservador y de un gobierno de izquierdas progresista: el primero mejora la vida de los que más tienen, de los poderosos. Lo hizo el Partido Popular en la crisis de 2008 salvando a los bancos en lugar de a españoles y españolas. El Gobierno de izquierdas, sin embargo, mejora la vida de todos los ciudadanos y ciudadanas, sobre todo, priorizando a los que más lo necesitan (como hacen los padres de bien con sus hijos).

Qué importante es refrescar la memoria, que tengamos apertura de miras para mejorar la sociedad y buscar bien la información para que no nos engañen las derechas, para que no nos manipulen, ellos y sus terminales mediáticas engrasadas con dineros públicos.

El objetivo de la derecha es  manipular a la ciudadanía con la  Amnistía, cuando saben que no es el problema, y que es la herramienta para seguir dialogando y tratar de lograr la convivencia con Cataluña. Desde que gobierna Pedro Sánchez, ni una manifestación en Cataluña a favor de la independencia. Con Rajoy y el PP se aumentaron los partidarios de la independencia del 29% al 35% y en su momento mas algido al 48,5%. En definitiva, la derecha conservadora y ultra son máquinas de crear independentistas y de crear odio entre los españoles que piensan diferente.